Comida rápida que sea saludable?
Esto suena maravilloso para ser cierto...
Lo que sucede es que la comida rápida tiene una reputación de ser alta en grasas trans, grasas saturadas, sodio y calorías, y no tiene ningún ingrediente saludable para ti. Por ejemplo, una hamburguesa está cargada con papas fritas y contienen el total de grasa saturada que deberías consumir en dos días.
Sin embargo, las cosas están cambiando. Los últimos años hemos podido notar como muchos restaurantes de comida rápida han tratado de hacer un esfuerzo para mejorar sus menús. Como resultado, muchos restaurantes ahora ofrecen opciones bajas en grasa e ingredientes frescos. Te toca a ti elegir sabiamente para de esta manera no sacrificar tu salud sólo por conveniencia.
Pero para hacer esto, debes estar sumamente informado, tienes que resistir las tentaciones del menú, y tomar decisiones saludables. Encontrar una comida nutritiva, barata y conveniente puede ser un desafío, pero lo puedes hacer.
Ten cuidado con el menú. Mantente alejado de las comidas etiquetadas como fritas, empanadas, bastidas, cremosas, crujientes, batidas en trocitos, gratinadas, horneadas en tiras o Alfredo. Estos platos son generalmente altos en grasas no saludables y contienen mucho sodio y calorías extras que no necesitas.
En lugar de éstas, toma las opciones de carne magra que se asan a la parrilla y verduras frescas o al vapor. Ordena tu comida para que esté preparada de una manera más saludable.
Ten mucho cuidado con los extras. Una ensalada puede parecer una opción baja en grasa hasta que le añades cosas fritas, aderezo alto en grasa y/o queso. Por ejemplo un sándwich es una gran opción hasta que le añades la mayonesa y el extra queso. Lo mismo ocurre con una papa al horno que deja de ser saludable cuando le añades la mantequilla, el queso, el tocino, la sal y la montaña de la crema agria entre otros.
Esto es simple, los ingredientes frescos son los mejores. Pide aderezos y cualquier cosa que añadas pídela al lado así tienes más control de lo que le agregas.
Ten mucho cuidado con el tamaño de las porciones. Una sola porción en muchos restaurantes podría alimentar a toda una familia. La comida promedio en una comida rápida puede contener más de 1.000 calorías. Las opciones extra grandes deben ser reemplazadas con porciones más pequeñas o compartidas con familiares o amigos. No pases por alto las calorías contenidas en las bebidas. A menudo puedes pasar por alto las calorías en refrescos y bebidas azucaradas las cuales se suman rápidamente a las de la comida, y eso no lo deseas si tu meta es bajar de peso.
Trata el agua con limón en lugar de cualquier bebida azucarada.
Ten mucho cuidado con los bufets! Incluso si eliges consumir ensaladas, los bufets te colocan en la posición de comer en exceso. Es muy posible que sólo desees que tu dinero valga la pena, pero lo más probable es que consumas más de lo que tu cuerpo necesita.
Después de terminar tu comida, espera al menos 20 minutos antes de regresar por el siguiente plato. Tu cuerpo necesita tiempo para decirle a tu cerebro que tu estómago está lleno.
Ten cuidado de comer a la carrera. Desafortunadamente, cuando tienes prisa no piensas en lo que estás comiendo y tiendes a comer en exceso, te vuelves glotón. Sucede que eliges lo más barato del menu y muchas cosas del mismo, no lo hagas. Evita comer en exceso solo porque es barato.
Trata de reducir la velocidad en la que comes masticando lentamente. Tu alimento se digiere más fácil y es bien probable que comas menos. Recuerda tomar tu tiempo para que tu cerebro reciba el mensaje de que está satisfecho. Así que mastica bien y bríndale a tu cerebro el tiempo que necesita.
Se inteligente.
Saber es la mitad de la batalla. La otra mitad está en tomar las decisiones correctas. Depende de ti conocerte para poder mejorar tus hábitos alimenticios.
Siempre hay opciones en vez de elegir una hamburguesa grasosa elige un sándwich de pollo a la parrilla. En lugar de una batida elige el yogurt. En lugar de papas fritas opta por papas al horno o ensalada. Sólo asegúrate de elegir de manera correcta, tú tomas las decisiones no dejes que las decisiones te tomen a ti.
El alimento rápido no debe ser la norma.
Si bien hay opciones más saludables en estos días en las tiendas de comida rápida, nada es tan fresco y nutritivo como una comida casera, baja en grasa. Guarda las comidas en los restaurantes de comida rápida para raras ocasiones cuando no hay ninguna opción.
Elige mejorar tu salud, no empeorarla.
*****Recuerde que el ejercicio es una gran parte de la ecuación cuando se trata de lograr la pérdida de peso, no lo pases por alto*****